Estimada Comisión Directiva de AFRU
En virtud de la Resolución adoptada por el Ministro de Educación y Cultura, en la cual se dispone mi pase a cumplir funciones en régimen de comisión de servicio a la Unidad Ejecutora 021 “Dirección General del Registro de Estado Civil” y habiendo tomado conocimiento del Comunicado realizado por vuestra gremial, es mi obligación como funcionario y como persona, realizar las siguientes consideraciones :
En primer lugar manifestar mi profundo agradecimiento a la directiva de AFRU y sus asociados, más aún cuando no integro dicho gremio, lo que hace aún más valiosa la solidaridad y apoyo que tuvieron hacia mi persona desde el primer día en que se conoció la situación.
Es este tipo de apoyo y gestos lo que da fuerzas para seguir adelante y en momentos difíciles se valoran aún más, por lo cual GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.
En lo que refiere al intespestivo traslado, el hecho de que éste se haya realizado sin previo aviso, sin conversación alguna y sin ningún fundamento claro y objetivo, salvo el establecido en la resolución : “la necesidad de reforzar el personal con perfil informático en la Unidad Ejecutor 021 – Dirección General del Registro de Estado Civil” (lo cual no se condice con las necesidades de la propia organización registral que se encuentra en las mismas condiciones) hace inferir, aunque no se manifieste explícitamente, que obedece a otras circunstancias e intereses, que en ningún lado se plasman y que espero que el tiempo ponga de manifiesto y en su lugar, en forma clara y contundente y en donde asuman las debidas responsabilidades cada uno de los actores que intervienen en el Proyecto DGR Digital.
En definitiva, me alejo de esta Enorme Institución Registral, en la cual pude transcurrir más de 35 años de mi vida, aportando en lo que pude al desarrollo de la misma, en proyectos pequeños, medianos y grandes, acompañado de un excelente grupo humano y técnico que permitió hacer las cosas más fáciles. Dentro de ella pude constituir mi familia, criar mis hijos y reunir un grupo de excelentes y solidarios compañeros que me acompañaron en las buenas y fundamentalmente en las malas.
No era la salida que esperaba, o mejor dicho que pretendía, de esta noble institución. Pero nuevos rumbos, experiencias y proyectos desafiantes (de los que más me gustan), me esperan en la actividad pública y privada, con la convicción de que siempre voy a contar en la DGR con grandes compañeros de vida, de los cuales me llevo grandes recuerdos.
Muchas Gracias a Todos.
Un Fuerte Abrazo y hasta cualquier momento!
Hebert